“Lo que sucedió fue que una coalición formada por yihadistas y un sector más partidario buscaban derrocar al presidente Bashar al-Ássad, quien contaba con el apoyo de Rusia”

“Estamos frente a un viejo orden que está muriendo, que es la rivalidad entre Arabia Saudita e Irán, y estamos asistiendo a la generación de un orden nuevo. Por un lado, tenemos un proyecto liderado por Israel que busca expandir sus fronteras de seguridad, este proyecto está entrando en colisión con el proyecto de Turquía”

“No son dos conflictos que estén directamente relacionados entre sí, pero son dos conflictos que encajan como si fueran las partes de un rompecabezas. Las guerras del siglo XXI, a diferencia de las que vivieron nuestros abuelos, son de carácter cambiante y difíciles de resolver. Los conflictos se van complejizando y aparecen nuevas dimensiones de intervención”

“Hay un proyecto por parte de Israel que se está desarrollando y hay otro que también se está incrementando por parte de Turquía. Son dos iniciativas que se confrontan, veremos cómo encajan o chocan.

“La salida de los Assad es una buena noticia. Esta coalición entre ex yihadistas, o yihadistas moderados, y un sector de árabes que cuentan con el apoyo de Estados Unidos y son más laicos, ¿Cuánto tiempo va a sobrevivir? ¿Podrá sobrevivir una alianza de este grupo?, ¿Va a poder llevar a Siria a buen puerto? Hay que ser muy cauto con esto. Las perspectivas son buenas, pero veremos cómo se va resolviendo la cuestión”

“El Medio Oriente es muy rico en diversidad,  en grupos étnicos, factores religiosos y lenguas. Estas cuestiones en tiempos de conflicto, generan mayor división. La lección de Irak nos dice que, si el  camino de Siria no se toma con responsabilidad, seriedad y cabeza fría, podríamos terminar en un escenario de mayor división, desintegración y de conflicto como el que se vio en Irak”