“Esto es lo más groso después de la Formula 1”.

“Uno va cayendo de a poco, que te pongan al lado de un grande como Fangio es increíble. Sigue siendo record en muchas estadísticas. Lo importante es haber podido llevar los colores argentinos a lo más alto. Escuchar el himno en cualquier lugar del mundo emociona”.

“Haber podido ganar con este equipo que confió en mí es una satisfacción muy grande”.

“Fue raro cuando llegué al equipo porque uno lo conoce y ahora competís con él. No sabía que esperar, no sabía cual era mi rol. Me pusieron a la altura de campeones mundiales”.

“Como me recibió el equipo desde el primer momento fue muy bueno, tuvieron gestos muy lindos. Cuando gané todos los franceses se pusieron la remera de Argentina con el número de mi auto”.

“Los franceses son más frios, inclusive  pasas por al lado de gente que conoces y nadie saluda. Se viven muchas presiones, es otro ambiente”.

“Cuando uno es chico no se da cuenta, ahora aprovecho de todos los momentos y disfruto todo lo que hago. Lo de Formula 1 ya es otra etapa, hace mucho no me subo a un auto como ese, sería difícil volver”.

“El hecho de que hayan pasado 57 años desde el último campeón del mundo demuestra lo importante y lo difícil que es”.